domingo, 28 de junio de 2009

Aventura

(Probablemente nadie, mas que una persona, entienda lo siguiente... Aún así, valió y vale la pena.)

Vicio, amor, ternura, impulso, pequeña acrobacia, espacio justo.

Agitación, palpitación, locura semidesnuda...

Humedad, calor, vaho, sudor...

Silencio.

Oscuridad.

Excitación... Justicia.

Temor. Pena. Temor.

Frustración.

Huida.

Amor. Ternura.

Risa.

Alegría.

Amor.

Simbiosis.

Amor.

Complicidad.

Eternidad...

miércoles, 24 de junio de 2009

Frases célebres

Y yo que creía que esto ya había quedado atrás... Cuando todo apuntaba a que el diablo había dejado de inmiscuirse en la cultura, la reconocida actriz Florinda Meza afirmó... bueno, léanlo aquí.

martes, 16 de junio de 2009

1/4 de Paz

Había olvidado ese dolor profundo que carcome el pecho, el estómago y que se filtra por el abdomen. No es un dolor intenso como el de algún malestar físico, pero sí es un dolor más penetrante, sin remedio aparente. Mezcla de amor y coraje, de dolor y alegría... (Más amor que coraje y menos dolor que alegría)

Te leo. Me gusta, aunque termine condensándose en gotas de ácido escurriendo por mi interior, destruyendo órganos y tejidos a su paso.

Me fascina el presente e imaginar el futuro. He repetido ad nauseam la alegría que me domina, la ilusión que me invade, el deseo que me corroe. Pero me duele el pasado. Tú pasado y mi pasado. Te leo y me leo. Imagino cosas que conozco y otras que no me corresponden.

Me dueles. "Me dueles. Mansamente, insoportablemente, me dueles. Toma mi cabeza, córtame el cuello. Nada queda de mí después de este amor", diría Sabines. Me dueles pero me gustas. Me dueles pero me llenas. Me dueles pero no encuentro nada más fuera de ti que no seas tú. Me dueles con un dulce, suave dolor que me convierte al masoquismo.

¿En qué momento apareciste? Me tomó por sorpresa -sé que a ti también- y no estaba listo para soportar el dolor -no porque no quisiera hacerlo, pero es bueno estar preparado-. Aún así, me gusta recibir los golpes por ti y por mí, aguantar, berrear -aunque no lo entiendas-... quedarme contigo.

Me restituyo cuando, al final del día, me tomas entre tus brazos, cuando con el gesto indescriptible de ternura me envuelves, cuando duermes, cuando me haces tuyo y te hago mía y cuando, tras escapar de ese tunel de amargura, de ese oscuro y sucio pozo, me doy cuenta, una vez más, que te quiero.

¿Qué sería de mí sin ti, sin Estrella Polar, sin gomitas, sin palomitas en el cine y sin flores con olor a limpio? ¿Qué sería de mí sin tu amor?

martes, 2 de junio de 2009

Colmillo

Me enteré, en horarios de trabajo, de la trágica muerte de Colmillo. Miren que atropellar a un perro y escapar...

No es difícil recordarlo echado junto a la puerta principal, dormido, ignorando al mundo. Me hubiera gustado hacer lo mismo en algunos momentos.

A veces, cuando nos sentábamos en la escalera de la entrada, ahí estaba él. Casi nunca quería amigar pero, dentro de lo que cabe y gracias a IZ, creo que le caíamos bien. Acariciarlo dejaba las manos sucias y olorosas, pero aún así era algo que había que hacer. Era, objetivamente, un perro muy bonito.

Iba y venía como quería. Por años fue el emblema del ITAM. Me siento afortunado, realmente, de haberlo visto casi cada día durante los años que ahí estuve.

Imaginarlo sufriendo hasta que llegó al lugar donde lo "dormirían" es difícil. Puede sonar exagerado pero, lo confieso, estuve (aún estoy, un poco) al borde del llanto.

2 de junio de 2009 - Requiem in Pacem: Colmillo