jueves, 5 de febrero de 2009

Si algún día una civilización extraña nos domina y extermina y destruye nuestras ciudades y construye templos iónicos sobre nuestras iglesias y destina al olvido la mayor parte de nuestras pertenencias e invenciones e idioteces... ¿Llegará, siglos luz después, algún antropólogo/arqueólogo/minero/constructor-de-línea-de-metro/niño-perdido futurista y descubrirá la internet? De lo contrario, todo esto quedará en el olvido. Ojalá esa extrañañ civilización llegue pronto...

Me da miedo cuando no sé si un doctor me está regañando por algo o simplemente es su manera de dirigirse metodológica y científicamente a sus pacientes. Hoy me pasó... Qué si llegué diez minutos tarde y sólo esta vez me atendería porque tiene citas cada media hora, qué si le estaba diciendo lo objetivo de los criterios de un médico anterior y no lo subjetivo de mis síntomas, qué si tenía que decirle en qué quería que me ayudara puntualmente, qué si... Aunque al final me cayó bien el viejillo doctor.