domingo, 27 de mayo de 2007

De horas y minutos

Ayer, durante una charla de esas de espera a la entrada de un concierto, nos topamos (la señorita que me acompañaba y yo) con un tema de esos que, quizá, a ninguno de ustedes le interesará. Puede ser que, en algún momento, se hayan ustedes topado con un cartel con horarios del estilo "10:32", "20:49" ó "03:17". No me refiero, evidentemente, a un reloj que, necesariamente (siempre y cuando funcione), deberá pasar ciclicamente a lo largo de dichas cifras. Me refiero, en cambio, a, por ejemplo, horarios de trenes en estaciones europeas. Precisamente ahí surge todo. ¿Son válidos estos horarios únicamente en lugares, como Europa, donde cada minuto tiene un peso significativo?
Concluímos que en México poseé un significado aún mayor. En primera instancia, es válido usar este tipo de horarios debido a que, desgraciadamente, un minuto, veinte o sesenta, resultan exactamente igual dentro del entendimiento de la gente. Da lo mismo si se establece la 1:00 p.m., la 1:30 p.m. ó la 1:45 p.m. como hora de encuentro, todos llegarán a las 2:30 p.m. con un poco de suerte. Por lo tanto, decidir establecer la 1:33 como hora acordada, será irrelevante. Ahora, en cambio, si este tipo de horarios los ve un europeo le resultará enteramente natural; pero, si es un mexicano quien usa estas inusuales combinaciones le dará, sin duda, mucho caché.
Por esta razón, podemos concluir, es mejor emplear estos horarios en México que en cualquier país civilizado donde la puntualidad tenga un valor práctico en la vida cotidiana. De hoy en adelante comenzaré a conminarlos a horas precisas. Que no les extrañe.
Espero que esto tenga, además, un efecto psicológico y reduzca los tiempos de espera.

lunes, 21 de mayo de 2007

Ceguera

Mi debraye anterior me llevó a recordar una pregunta a la cual nunca he encontrado respuesta. Espero que alguno de ustedes pueda ayudarme.
Existen, supongo, distintos tipos de ceguera. Algunos ocasionarán, supongo una vez más, que la gente vea todo negro dada la ausencia de luz y, por lo tanto, color. Sin embargo, creo que debe existir un tipo particular de ceguera en la cual no sólo no se perciba la luz, sino se carezca enteramente del sentido de la vista y, quizá, los nervios ópticos, lo que ocasionaría que no se tenga siquiera percepción alguna de lo visto, dígase negro, verde, amarillo, bermellón, cerúleo, blanco o cualquier otro color. Simplemente no se conoce lo que es la vista.
¿Alguien puede confirmar o negar esto?

Realidades Alternas

¿Quién no se ha apasionado en algún momento por los sueños? Seguramente, al menos, por alguno de ellos y, muy probablemente, ha confundido, o querido confundir, uno de esos sueños con la realidad.
Cada periodo de sueño, generalmente desarrollado durante el periodo REM (Rapid Eye Movement), dura apenas unos minutos. Cada uno dista del anterior entre 90 y 120 minutos y va incrementando su duración en el transcurso de la noche. Durante estos periodos se secretan una serie de hormonas que paralizan los músculos del cuerpo; pero, si esto no es así, la persona puede llegar a actuar sus sueños.
Existen, sin embargo, algunos inhibidores del sueño REM. Algunos de ellos son: el alcohol, los antidepresivos y algunos tranquilizantes menores que, muchas veces, son diagnosticados para inducir el sueño (dígase Valium o Ativan).
Hay, por otro lado, partes de la realidad en la que, quizá, quisieramos estar soñando. Las OBEs (Out-of-Body Experiences) son fenómenos en los que las personas parecieran ver el mundo desde fuera de su propio cuerpo, en una especie de "segundo cuerpo". Más que imaginación, dicen algunos, es muestra de las capacidades psiquicas y psicológicas del ser humano.
La actividad neuronal continúa por algunos minutos después de la muerte corporal. Algunos dicen que este tiempo es suficiente para que la persona recree buena parte de su vida en proporciones suficientemente reales, viviendo, por decirlo de algún modo, por segunda vez algunos pasajes de su vida.
Esto podría llevarnos a separar la realidad corporal de la realidad mental. ¿Qué nos permite estar seguros que ambas conviven apegadas una a la otra? Es decir, ¿no podríamos pensar ver algo distinto a lo que "en realidad" estamos viendo? Recuerdo, y hago alución directa a ello, un debraye chelero de hace ya algunos años. ¿Cómo podemos saber que, aquello que para nosotros es, por ejemplo, una pared, no es para otro un pasillo? ¿No podemos nosotros hablar de un tema y adaptar las respuestas del otro a nuestra secuencia de pensamiento mientras que el otro habla de algo enteramente distinto o, quizá, no habla? ¿Podríamos estar viviendo solos e imaginando todo lo que existe y sucede a nuestro alrededor?
Realidad, sueños y neurobiología: la tríada de la confusión. Vayan ustedes a saber qué es lo que en realidad está pasando por sus vidas, mi vida y la de los otros. Descifren si en realidad existen tales vidas.
Quizás ahora piensen que estoy loco, pero nada les asegura que lo que leyeron y entendieron es lo que en realidad escribí y quise decir. Puede que el loco no sea yo.

lunes, 14 de mayo de 2007

Football is Music

Dos alegrías de la vida: el futbol y la música.
¿Qué mejor que Bob Marley, con sus legendarios (y favoritos de un servidor) Samba, pamboleando?

domingo, 6 de mayo de 2007

El Tao Tao

No hay palabras que antecedan atinadamente a este video. Sólo veanlo. Una colaboración de Isabel Zapata.

miércoles, 2 de mayo de 2007

Fawlty Towers

Manuel, todo un clásico de la magna serie Fawlty Towers, ícono del humor inglés, protagonizada por un par de los actores de la también legendaria serie Monty Python.
Nota: A todos aquellos que no sepan apreciar este refinado sentido del humor los vetaré de mi blog.